El resurfacing fraccionado ablativo con tecnología láser QS es un tratamiento de medicina estética de última generación diseñado para renovar la piel de forma segura, precisa y eficaz. A diferencia del láser CO2 tradicional que actúa por calor (efecto fototérmico), este procedimiento utiliza un efecto fotoacústico que no genera calor ni coagulación, por lo que no daña las capas internas de la piel ni requiere un tiempo prolongado de recuperación.
Gracias a esta tecnología, conseguimos una regeneración cutánea profunda con una recuperación mínima, ideal para quienes desean mejorar la calidad de su piel sin interrumpir su rutina diaria. El tratamiento se realiza con anestesia tópica para mayor confort, y es completamente indoloro.
Es especialmente útil para tratar arrugas, poros dilatados, marcas de acné y textura irregular, aportando a la piel un aspecto visiblemente más joven y saludable.
Este procedimiento es uno de los más completos para rejuvenecer el rostro y mejorar la textura cutánea sin efectos secundarios relevantes:
Es una técnica muy demandada por su eficacia y por ser apta para todo tipo de pieles, incluso en épocas del año en las que otros tratamientos estarían contraindicados.
La duración total del tratamiento es de 45 a 60 minutos, incluyendo el tiempo de aplicación de la anestesia tópica y la realización del láser en las zonas indicadas.
No requiere hospitalización ni cuidados especiales posteriores, por lo que el paciente puede retomar sus actividades diarias con normalidad a las pocas horas.
No, el resurfacing fraccionado con láser QS es un tratamiento completamente indoloro. Para garantizar el confort del paciente se aplica anestesia tópica local antes de iniciar el procedimiento.
Tras la sesión, la piel puede presentar un leve enrojecimiento durante unas 48 horas, pero sin molestias ni dolor.
Este tratamiento es ideal para:
Aquellos que buscan resultados visibles con mínimo tiempo de recuperación
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